Cada vez el jurado está demostrando que son unos inútiles, para esto que pongan a Leonardo Dantés, Cañita Brava y Luxi Toledo como hizo Santiago Segura en su programa y ya verás como lo harán mejor. Las nominaciones son más previsibles que un capítulo de “Los Serrano”, hasta Esperanza Gracia en su completa ineptitud para predecir el futuro podría adivinar los nominados antes de la gala, y los rifirafes de Ángel y Risto en plan Santi Santamaría y Ferrà Adrià ya cansan. Pero ver OT es como cuando te das un golpe en el húmero con el pico de una mesa, te produce un dolor insoportable pero no sabes por qué la sensación es placentera y no puedes parar de descojonarte de la risa.
PABLO & IVÁN:
Primero, quien haya dado con el parecido de Maliván con Carla Duval, la hermanísima de Norma Duval, la musa del PP e ídolo de la infancia de Noelia, se merece que le pongan una calle con su nombre.
¿No notásteis como la cara de Pablo, al principio de las nominaciones, estaba todo serio y ceñudo en plan “Pues oye, me estoy planteando seriamente si en realidad no soy el mejor artista que ha existido desde Ludwig Van Beethoven, que soy humano y puedo tener fallos” a cambiársele por completo la expresión cuando dijeron lo del efecto-Pablo y lo bien que lo hacía, se le inyectó tanta auto-estima que con la que ya tenía de reserva casi explota y se le puso una sonrisa de oreja a oreja como pensando “soy el puto amo”, “seguramente Bruce Springsteen me esté viendo y quiera hacer un dueto conmigo con una canción compuesta por mí y con arreglos míos” , “de aquí a la dominación mundial con mi voz hay un paso”, y mientras más se lo iban diciendo dentro de él iba creciendo más y más, henchido de orgullo: “conquistaré este planeta y todos me rendirán pleitesía” o “soy una deidad supra-celestial, perfecto, eterno e inmortal que ha bajado a La Tierra con forma de super-humano atractivo, inteligente, artista, dotado y sexualmente hiperactivo para regalar a mis subordinados con mi magnífica voz y mis insuperables canciones”. Era lo que le faltaba.
Lo de que Iván se vaya salvando de las nominaciones con actuaciones tan malas como las de esta gala, que harían que Ana Obregón mandase a su guardaespaldas a que le metiera una paliza porque no había oído a nadie cantar más mal desde Victoria Beckham en las duchas del gimnasio, sólo puede ser explicado con la teoría de los servicios sexuales a Ángel Llàcer. Iván cada noche, después de criticar a todos sus compañeros, a los cámaras, a los redactores, a los cocineros, a la señora de la limpieza, a la profesora de Batuka, a Pila Eyre por hacerle sombra y así uno a uno hasta no dejarse a nadie, cantar canciones de Marisol, disfrazarse de Carmen Miranda y restregar su pluma por toda la casa, cuando están todos dormidos va de puntillas al despacho del director y le hace un trabajito y después de cada coito le pregunta a Llàcer “como te quedas” y este le responde “¡Muerta!”. Y Ángel a cambio le ayuda a librarse de las nominaciones sobornando al jurado (a Risto le promete seguir peleandose con él para seguir teniendo más minutos de televisión; a Noemí Galera le promete un escarceo sexual con Rubén que le pondrá la pata arriba en postura tae-kwondo; a Javier Llanos le promete acordarse de su nombre la próxima vez que lo vea y a Cocó le promete una de esas muñecas articuladas para que pueda abrirle y cerrarle las piernas a su gusto).
Con un inglés del CCC salieron el pianista del hotel y Carla Duval a destrozar una canción de los Beatles, por el placer y la tradicción de despedazar un clásico cada semana, es ya como una mini-sección dentro del programa que se llama: “VIOLACIÓN ANAL A LA MÚSICA”. Lo mejor es que recrearon el espíritu de la esplenderosa y mítica “Poyeya” diciendo nada más ni nada menos que 4 veces (no superan las 7 de So
VIRGINIA:
Con todo el plató iluminado de azul y al fondo aparcado el platillo volante de los padres de E.T. con las luces encendidas, Virginia con esos grandes ojos azules parecía un extraterrestre, me recordó al ser que sale al final de cierta película de actualidad que no quiero dar spoilers para no arruinar a nadie pero se trata de un arqueólogo sextagenario que va por ahí haciendo el ridículo con sombrero y látigo persiguiendo a los comunistas, por supuesto como habréis adivinado me estoy refiriendo a Fraga. Yo creo que en realidad Iván es como Donovan de la serie “V: Invasión Extraterrestre” y la chupipandi es La Resistencia, e Iván ha descubierto que Virginia es en realidad una extraterrestre encubierta, le ha arañado la cara, le ha quitado la piel y ha visto que debajo de su disfraz de humanoide víctima de la sociedad se esconde un terrible ser con parecido a Jordi González, con oscuras intenciones que viene a lavarnos el cerebro a través de sus actuaciones cuya voz rara y temblorosa es en realidad una señal acústica neuronal que contiene un mensaje subliminal para que todos nos metamos los dedos en la garganta y nos ahoguemos en nuestros propios vómitos. Pero digo yo que los extraterrestres pierden el tiempo y se han informado poco de nuestra sociedad, para eso ya está OT en sí, no hay que meterle ningún aditivo como los suflés de Adrià. Y si no siempre estarán Amaral.
La cuestión es que volvió a desafinar cosa mala y Cocó que es mala, muy mala, la volvió a coger por banda. Yo siempre he mantenido que Cocó es la jurado más vil de todos, que Risto es un pelagatos al lado suya, y a Virginia le tiene una manía que no puede verla y al final de su valoración, después de decirle que lo canta todo igual y que se tendría que ir a su puto planeta, le dijo con tonito y mordiendose la lengua “Muchachita, mucha mierda” pero por no decirle “Hija de la grandísima chingada, me tienes hasta el puto coño con tus tonterías de marginada y tu tonito de gruñido de cerdo siendo despellejado por unos banderilleros, por mi estarías fuera comiendo mierda de rinoceronte sidoso y si tuviera unas alicates aquí mismo te sacaba de la cuenca esos ojos de psicópata austriaca y a mirar mal a tu puta prima la del pueblo”. Menos mal que Coco lo interioriza todo.
Ya no sabe lo que cantar porque dice Risto que “Creep” no es una canción de OT. Yo le aconsejo que escoga entre “Estilo” de Valerio Pino featuring Laura Negrete, “Lorenzo” de la cantautora Sonia Monroy o recurra a los clásicos como “Superstar” de Bienvenida Pérez… y si no siempre puede cantar una de Luis Miguel o Marc Anthony por octingentésima vez, que esto es OT, ¿de eso se trata, no?.
ANABEL:
Ésta perdió la gracia con lo del chupachups y ahora pasa más desapercibida que Sergio Rivero en una convención de cajeros del super. Además, que siempre lo baila todo igual (fijáos bien en el paso que siempre repite: giro dramático hacia atrás… camino hacia los bailarines con intensidad y suspense… y vuelta a hacer giro dramático y poner cara de haber vivido trágicas historias y experiencias que le cambiaron la vida) y todo lo canta también igual, en plan coplero. En vez de en OT debería de estar en “Se Llama Copla” de Canal Sur. ¿Y qué significa ese pedazo moño?. ¿A quién lleva escondido ahí dentro? ¿A Falete que la va dirigiendo en sus movimientos como una títere?.
SANDRA:
Antes tenía pinta de yonki bakala tatuadora y ahora de ex-yonki reformada recogiendo botellas de agua y periódicos gratuitos en el parque para los Servicios de Limpieza del Ayuntamiento. Le tiñeron el pelo más oscuro, como se lo tiñen las grandes divas cuando han evolucionado, para parecer más serias y espirituales, y se re-inventan con sonidos extraños y mensajes profundos en las letras… y no me estoy refiriendo a minunguis como Madonna o Mónica Naranjo sino a gente de la talla (extra-larga) de Erica Magdaleno.
La buena notícia es que ha vuelto el coro gospel de Lorena y con ella el regreso más esperado, el de la Gorda Pelirroja Sookie, que es la dietista de Noelia. O más bien la Noelia del futuro que ha viajado al pasado para advertirle lo que le pasará si sigue devorando tanto dentro de la Academia. “Mírame, entré bien moza, con carnes prietas pero atractiva y de toma pan y moja y por culpa tuya engordé 40 kilos y ahora sólo me admiten en coros gospel, de operaria de máquinas semi-automáticas en una fábrica alimenticia o de invitada en “El Diario de Patricia” y futura pirómana”. El coro gospel lo formaban o gordas o magrebíes que se encontraron vendiendo la última de Indiana Jones (a esto se le llama retro-spoiler), les pusieron sotanas y les prometieron un bocata de jamón (a esto se le aplica tanto a los magrebíes y a las gordas del coro gospel, como a Mimí y a Noelia), solo faltaba que Chipper se pusiese una toca de monja y empezase a dirigir al coro en plan Whoopy Goldberg en “Sister Act”.
En cuanto a la dulce y educada Sandra, se ahogaba más que Juan Adriansens sufriendo un paro cardiaco y además, no estaba puesta en la canción, le costaba encontrarse, como cuesta encontrar el tanga de Noeliaentre el amasijo de su culo, vete a saber por donde estaba en la famosa escena donde nos lo muestra en todo su esplendor, ya estaría succionado para dentro y todo. Y al final de la canción no llega a sostener el agudo y para disimular se pone a dar vueltecitas como si de juego de la patata se tratase.
MANU:
No entiendo que nos mencionaran una y otra vez que “todos recordabamos la memorable interpretación de David Bisbal” de este tema, cuando lo único que yo recordaba es como se le iban abriendo las aletillas de las fosas nasales alarmantemente hasta el punto en que se iban transformando en dos agujeros negros que iban a absorver a Pilar Tabares y a la galaxia entera. Todo esto con una banda sonora de peli de terror con repulsivos y aterradores sonidos guturales que iban in crescendo hasta reventar las cabezas de todos los presentes como los zombies de “Resident Evil”.
Así que si la cuestión era hacernos olvidar de un intento de asesinato masivo a traves de una execrable actuación, pues sí, gracias a dios (Pablo) la interpretación de Manu no abrió las puertas del Infierno. Simplemente provocó ganas de devorarte tus propios dedos y expulsar el hígado por la boca, lo normal en OT, pero no hablamos de la exterminación de la raza humana.
MIMI & TANIA S:
Javier Vázquez dijo en plan Doctor Frankestein cuando vio levantarse a su creación o el cirujano de Amor: “haremos de Tania S. una mujer”. El proceso de cambio de sexo tiene un desarrollo lento y no hay que pretender que el hombre que quiere ser mujer se le corte la minga con una hoz y al dia siguiente se compre la Cosmopolitan y no se pierda un capítulo de “Anatomía de Grey”. No hay que darle prisa a Tanio, primero que aprenda a andar con tacones, que le den una master-class Iván y Reke que como demostraron en la Academia de esto saben un rato. Que Reke le enseñe el arte del aspamiento de las manos e Iván le ayude con el arte de criticar a las demás mujeres y dentro de nada Tania S. ya será toda una mujer.
En cambio a Mimi le sobra la feminidad y hormonas. La llevan salvando semana tras semana en un intento de aguantarla hasta las últimas galas y hacer de ella una Edurne treintañera con botox o una María Conchita Alonso de pacotilla (uggh, ahora me doy cuenta de que los tres nombres que componen el nombre completo de la gran actriz de “Depredador 2”: María (Patiño: “tengo documentos que certifican que acabo de salir de un manicomio, y mis pelos también lo certifican”), Conchita (“soy una empalagosa que canta como un gato pisado”) y Alonso (“doy más asco que una pústula folicular enquistada y deberían de aplastarme el cráneo a puertazos y asesinarme de la forma más macabra e inimaginable posible concebida por una mente perversa y así viviríamos en un mundo mejor para nosotros y los nietos de nuestros hijos”). A parte de eso, Cocó lanzó otro de sus dardos envenenados con acento de la Cerdaña diciendole que había zorreado poco con los bailarines… o sea, ¡ella!. ¡Mimi!. La que se apuntaría hasta a una orgía improvisada con José Canseco, Inma Serrano, Walter Mercado y Jaime de Marichalar por tal de mojar. Es como decir que Esther desafina poco, que Yola Berrocal se tiene que poner más silicona o que Telma Ortiz es sosa.
NOELIA:
¿Por qué siempre nos deleitan con un primer plano del culo de Noelia en todas sus actuaciones?. Ya es su marca distintiva, como la patada al aire de David Bisbal, los agudos de Maraya o las tetas de Malena Gracia. Es el culo más famoso de OT desde el de Soraya o el de Idaira (cuando se tenía que describir una actuación suya). A parte de eso, no entiendo como Esther se ha convertido en un escarnio público y arquetipo de la desafinación en los conservatorios de música cuando la pobre lo que le pasaba es que le costaba cantar con lo que le pesaban las pestañas, demostrando Noelia por segunda semana consecutiva que no tiene nada que envidiar a la intérprete de “Las De La Intuición”.
Luego está la coreografía de los bailarines que era un poco aleatoria, en plan ahora levanto la pierna de frente y me pongo el pie en la cara como diciendo “toma peo para ti”, o se ponen seis bailarines detrás de Noelia para taparse y luego hacer el paripé de que en un prodigioso y nunca antes visto efecto tópico vuelven a aparecer, pero no se ponían en fila india sino en formación militar, uno al lado de otro para que Noelia los cubriese a todos. Y en un momento de la canción hay una especie de parón al cantar que es el típico momento en que hay un break musical en que el artista se pone a bailar una coreografía rítmica y me temía lo peor, que Noelia se pusiese a bailar y repitiese el infame Baile de Morselia y de aquí no salimos vivos, pero por suerte no ocurrió nada, todo fue una falsa alarma. La Humanidad respira tranquila. La que no respiraba era ella cantando.
CHIPPER:
La Profa Fumada se ha pasado de(con) la ralla con esta escenografía esperpéntica y más sobrecargada que un cuadro de La Chunga. A ver, ¿qué pintaba el montañista con la bicicleta y su mochila haciendo trekking por el plató y luego subiendose a la pared dando botes y unos graffiteros pintando la cara de Samuel L. Jackson a cuento de no sé qué?. Y luego los bailarines bailando hip-hop y todos vestidos con chándals y cadenas de oro. Todo en plan raperillo cuando la canción era pop barato moña que parecía el “What Time Is It?” de High School Musical. ¿Y por qué parecía más una actuación de “Fama, ¡A Bailar!” que de OT?. Pensé que de un momento a otro vería por ahí la cresta de Juan Carlos (que se llevaría a las mil maravillas con Iván), las ojeras y la cara de amargada profunda de Lorena, las cejas arqueadas de mala de telenovela de Vicky, a Ángel masturbándose delante de una cam, a Miguel llorando por el perro de Tania G. (llorarían juntos cuando Mónica Naranjo o Rihanna visitasen la Academia) y ahí en medio estaba la cubana Massiel cantando.
REKE:
Reke se ha ido moderando de sus aspamientos de brazos y movimientos de diva negra gay de la música disco de los ochenta, aún así no recordaba que Luis Miguel moviera las manos así cuando actuaba (solo cuando tenía que tocar el cuerpo de Maraya y porque tenía que abarcar mucho espacio). Hizo una actuación correcta pero al principio iba cambiando de voz, ahora canto normal ahora pongo la voz en plan Carmen Sevilla “ay mis ovejitas”, un caso de bipolarismo vocal como el de Eva la gallega de OT4.
Por último destacar la vuelta de David Bustamante al plató de OT. Ayer fue el peor concursante de la gala, y si hubiese estado aún Esther lo seguiría siendo. Desafinaciones múltiples, se ahogaba, cantaba de forma grotesca y encima esa coreografía arrítmica e incierta que no se sabía si se movía a la derecha o a la izquierda o qué cojones estaba haciendo… y lo peor es con la última actuación cuando cantó solo, ahí todo el mundo frenético en plan orgía rave, los concursantes dejándose la piel bailando, Noemí Galera en plan carpetera loca en una disco para menores y el público en una catársis delirante, como si fuese hubiese resucitado Jerry Lee Lewis y cantase “Ring Of Fire” acompañado de Van Morrison, Little Richard en los coros y Jimmy Hendrix en la guitarra y fuese aquello la actuación más apasionada y excitante del siglo… que se trataba de una puta canción mierdera latinada pachanguera de las miles que se pueden oir en las fiestas de los pueblos de España cantada por la Orquesta Los Chachos Forever, JODER. ¿Qué harán cuando Erica Magdaleno presente su nuevo single?. ¿Quemarse a lo gonzo para demostrar su entusiasmo?.
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